“En los últimos días, estamos observando un posible cambio en la situación militar que, tras un periodo de relativo estancamiento, parece dibujar un escenario más favorable para Ucrania. Una resolución rápida del conflicto, probablemente, constituiría el shock positivo más relevante que podemos imaginar para las bolsas, junto con una bajada rápida de inflación, particularmente en EEUU. En todo caso, el conflicto puede alargarse de manera indefinida (…), por tanto, en ese sentido, el foco de incertidumbre acerca de cómo puede evolucionar el enfrentamiento es notable. Lo que sí es cierto es que la presión en el ámbito energético seguirá siendo muy alta“, explica en su último análisis Pedro del Pozo, director de inversiones financieras de Mutualidad de la Abogacía
“Dada la elevada incertidumbre, es necesario que la ‘pensada de septiembre’ sea no solo profunda, sino también prudente. Debemos estar muy vigilantes y monitorizar de manera continua todos aquellos datos que puedan darnos una imagen real de la evolución de los precios y un seguimiento especial al conflicto en Ucrania, en la medida en la que puede alterar nuestro marco de actuación a muy corto plazo”, concluye el experto.
FUENTE: ELECONOMISTA.ES
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