Tras perder ayer un 4%, el petróleo ha vuelto a descender de forma acusada este miércoles (barril Brent: -4,45%, 71,97 dólares; barril WTI: -4,83%, 68,21 dólares) en medio de los temores crecientes ante una ralentización económica que acabe arrastrando la demanda de crudo.
El lunes el petróleo también cayó con fuerza tras el derrumbe sorpresa del PMI manufacturero de China de abril a territorio de contracción, y ese dato viene lastrando el sentimiento desde entonces, sumado a las expectativas de subidas de tipos por parte de la Reserva Federal (Fed).
“Las ganancias posteriores al recorte de la OPEC+ se han esfumado, lo que sugiere que los operadores creen ahora que las perspectivas económicas se han deteriorado hasta el punto de que el recorte de la producción no creará el déficit que se temía”, afirma Craig Erlam, analista sénior de Oanda.
Las caídas en el crudo están arrastrando estos días a las compañías del sector. Este miércoles Repsol ha sido una de las empresas que más ha cedido del Ibex en medio de estos recortes.
La crisis bancaria que atraviesa EEUU también está ejerciendo presión bajista sobre el petróleo, ya que es probable que desencadene un endurecimiento de las condiciones crediticias que también podría limitar la actividad económica.
“Los precios del petróleo parecen ser un área realmente preocupada por una recesión y una caída en la demanda, y parece que la OPEP tendrá que pensar en otro recorte en la producción bastante pronto si se quiere evitar un movimiento por debajo de los mínimos de marzo”, añaden desde IG.
Los analistas de Julius Baer consideran que el mercado del petróleo carece en cierto modo de dirección actualmente, ya que a los factores alcistas, como la reapertura de China, se oponen argumentos contrarios, como el temor a una recesión. En todo caso, consideran que, en general, el mercado se ha calmado considerablemente tras las súper sacudidas del año pasado, y que sigue asentándose.
“Las tendencias predominantes deberían persistir: la demanda mundial occidental de petróleo se estanca, en parte frenada por la transición energética, los flujos rusos se establecen fuera del hemisferio occidental, y los suministros de los países petroleros probablemente sigan superando las cuotas prometidas. Mantenemos nuestra visión neutral y vemos los precios del petróleo en el rango de los 70 dólares en lugar de los 80 a largo plazo“, comentan desde el banco suizo.
FUENTE: BOLSAMANÍA