Sin dejarse intimidar por la ralentización de la economía mundial, los compradores de componentes clave para el funcionamiento de los vehículos eléctricos están intensificando sus esfuerzos para asegurarse el suministro, y dos de los mayores fabricantes de automóviles del mundo han firmado acuerdos directos con los productores de los llamados metales para baterías.
General Motors Co. anunció el martes tres acuerdos para el suministro de las materias primas necesarias para su flota de vehículos eléctricos. Hace menos de una semana, Ford Motor Co. dio a conocer una lista de proveedores de insumos que van desde el litio argentino hasta el níquel indonesio, suficientes para construir 600.000 vehículos eléctricos al año.
El paso del mundo a los vehículos eléctricos significa que el crecimiento de la demanda de litio, níquel, cobalto y otros ingredientes clave de las baterías de los vehículos eléctricos está superando la oferta, que se ha visto obstaculizada por los problemas logísticos relacionados con Covid y la falta general de inversión, lo que ha hecho subir los precios.
Además, la preocupación por el predominio de China en la capacidad de refinado y fabricación de estos materiales es cada vez mayor.
La dependencia de la nación asiática se considera ahora una vulnerabilidad en medio de las tensiones comerciales y políticas que están estimulando un replanteamiento de las líneas de suministro mundiales.
“Estos acuerdos ponen de manifiesto la importancia de asegurarse fuentes de materias primas a largo plazo y diversas”, dijo Chris Berry, presidente de House Mountain Partners, una consultora del sector. “Va a ser muy interesante observar el acceso a las materias primas en la segunda mitad de esta década”.
Los fabricantes de automóviles se enfrentan a retrasos en las entregas de vehículos eléctricos, lo que agrava la preocupación por la seguridad del suministro. Eso les impulsa a demostrar la gestión de la cadena de suministro. “El anuncio de acuerdos con los productores de materiales puede ser un factor de diferenciación para la progresión de los fabricantes de vehículos eléctricos”, dijo David Deckelbaum, analista de Cowen and Co.
El primero de los nuevos acuerdos de GM para su próxima generación de vehículos eléctricos es con LG Chem Ltd. para suministrar 968.000 toneladas métricas de material para cátodos hasta 2030. El segundo es un acuerdo plurianual con Livent Corp. para obtener litio. El tercero es un acuerdo con Posco Chemical Co. para suministrar materiales para cátodos de 2023 a 2025.
Ford ha dicho que se ha asegurado el suministro de baterías suficiente para fabricar más de medio millón de vehículos eléctricos al año a finales del año que viene, lo que supone un salto cualitativo respecto a los 27.140 coches con baterías que vendió en EEUU el año pasado. Ha firmado contratos con proveedores que representan 60 gigavatios hora de capacidad anual de baterías.
La mayoría de los proveedores de los dos fabricantes de automóviles tienen o tendrán instalaciones regionales para suministrar materiales, lo que pone de manifiesto los esfuerzos por depender menos del refinado y la fabricación chinos.
“Las cadenas de suministro regionalizadas se están convirtiendo en una realidad”, dijo Berry. “Toda la palabrería sobre la vulnerabilidad estratégica se está convirtiendo poco a poco en acción y éste es quizás el aspecto más alentador de estos acuerdos de compra”.
FUENTE: WORLD ENERGY TRADE
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