Un demostrador tecnológico de generación de energía a partir de las olas, instalado en el estrecho de Bass (Australia), ha suministrado energía a los hogares locales durante más de 12 meses.
Según la Administración de Información Energética de Estados Unidos (EIA, por sus siglas en inglés), el potencial energético anual de las olas de la costa de Estados Unidos es de 2,64 billones de kilovatios-hora, aproximadamente el 66% de la generación anual de energía del país. Las olas del mar, disponibles en abundancia durante todo el año, pueden ser una valiosa adición a la creciente lista de fuentes de energía renovables que estamos aprovechando para reducir nuestra dependencia de los combustibles fósiles.
Sin embargo, hay un problema importante. Los científicos no han conseguido llegar a un diseño óptimo para aprovechar la energía de las olas. Mientras que algunos han intentado utilizar boyas oscilantes, otros han tratado de aprovechar las diferencias de presión en el fondo del mar cuando las olas pasan por encima para generar energía, todo ello con resultados no muy aceptables.
Energía del mar donde otros han fracasado
La primera unidad generadora de energía de Wave Swell es diferente porque tiene un diseño tipo espiráculo. Bautizado como el generador Uni Wave200, con un coste enorme de 12 millones de dólares, ha sido probado exhaustivamente en el Australian Maritime College.
Las pruebas de Wave Swell
En declaraciones, el director general de Wave Swell, Paul Geason, dijo que el generador había logrado tasas de conversión del 48%. Esto significa que, del total de la energía aportada por las olas, el generador suministró el 48% a la red. “Ese porcentaje es muy alentador y, de hecho, es superior al de otras tecnologías de energía renovable”, añadió Geason.
Con la unidad funcionando durante más de 12 meses, la empresa está preparada para dar el siguiente paso en la comercialización de su tecnología. Se espera que la siguiente iteración de su generador de olas genere cinco veces más energía que el UniWave 200 y pueda colocarse en cualquier costa del mundo.
Los generadores de olas también podrían formar parte de los rompeolas o diques que los países se disponen a construir a medida que el nivel del mar sube y las costas se erosionan. Tras el éxito de la demostración, el interés por esta tecnología ha llegado a diferentes regiones del mundo.
Sin embargo, también existe el estigma de otros proyectos en este ámbito. “En nuestra industria, la gente se acuerda de los que no funcionaron y piensa: ‘Oh, bueno, eso es energía oceánica, así que no puede tener éxito’, cuando en realidad eso no es cierto, y esta unidad [UniWave 200] lo ha demostrado”, dijo Geason.
FUENTE: WORLD ENERGY TRADE
NOTICIAS DE TU INTERÉS
Análisis de precios de las Criptomonedas del 8 de agosto
La construcción de marcas de nueva generación y la caída del casino NFT
Reforma tributaria de Petro incluye impuesto a exportaciones de petróleo y carbón