Mientras que las agencias gubernamentales están haciendo cola para demandar al FTX y a su fundador Sam Bankman-Fried, el grupo de antiguos clientes hizo un esfuerzo para recuperar su dinero primero.
Una demanda colectiva iniciada por cuatro individuos exige acceso prioritario a los fondos congelados de la compañía para sus clientes, no para los inversores.
La demanda fue presentada el 27 de diciembre en el Tribunal de Bancarrota de los Estados Unidos para el Distrito de Delaware. Cuatro demandantes afirman estar representando a toda la clase de antiguos clientes de FTX, que podrían acumular hasta 1 millón de personas. Lo que la demanda busca obtener son los derechos prioritarios para devolver los activos digitales en poder de FTX US o FTX.com a sus clientes.
Los demandantes enfatizan que el Acuerdo de Usuario de FTX no permitía que la plataforma usara los fondos de los clientes para sus propios fines, incluidos los préstamos o su uso para gastos operativos. Cualquier eliminación de los fondos de los clientes de las cuentas era una “mezcla inadmisible, apropiación indebida, uso indebido o conversión de la propiedad del cliente”, según la queja.
Por lo tanto, cualquier fondo congelado por FTX y rastreable como propiedad del cliente no se puede utilizar para pagar gastos, reclamaciones o acreedores que no sean clientes hasta que se reembolse a los clientes, según las demandas:
“Los miembros de la clase de clientes no deberían tener que hacer cola junto con los acreedores garantizados o generales no garantizados en estos procedimientos de bancarrota solo para compartir los activos patrimoniales disminuidos del Grupo FTX y Alameda”.
Recientemente, el Departamento de Justicia ha iniciado una investigación sobre el paradero de aproximadamente $ 372 millones en activos digitales desaparecidos de FTX. El 12 de noviembre, en medio de su bancarrota y colapso interno, FTX advirtió a los clientes de una actividad anormal de la billetera con respecto a al menos 228,523 Ether transferido fuera del intercambio de un perpetrador desconocido.
Se sospechó de otro juego sucio cuando las billeteras criptográficas asociadas con la firma comercial ahora en bancarrota Alameda Research, la compañía hermana de FTX, comenzaron a transferir fondos pocos días después de que SBF fuera liberado con un bono de $ 250 millones.
FUENTE: COINTELEGRAPH
