Los precios del petróleo subieron en las operaciones asiáticas del lunes, revirtiendo un comienzo débil, ya que la recuperación de la demanda china y un dólar más débil proporcionaron apoyo a un mercado agitado por la perspectiva de posibles nuevas subidas de tipos de interés en Estados Unidos.
Las condiciones del mercado reflejaban debilidad en medio de las preocupaciones sobre un mayor endurecimiento monetario por parte de la Reserva Federal que se han visto exacerbadas por los elevados inventarios de crudo en EE.UU., según afirmaron los analistas de ANZ Bank en una nota el lunes por la mañana.
Tras caer inicialmente en las primeras operaciones, los futuros del crudo Brent subieron 25 centavos, o un 0,30%, hasta los 83,03 dólares por barril a las 0700 GMT. Los futuros del crudo West Texas Intermediate (WTI) subían 23 centavos, o un 0,30%, a 76,91 dólares por barril.
El comienzo fluctuante de la semana para el petróleo se produce tras el impulso positivo del viernes, cuando los datos de empleo estadounidenses sorprendieron al alza. Los datos de febrero superaron las expectativas, con un aumento de las nóminas no agrícolas de 311.000, frente a las expectativas de 205.000 puestos de trabajo añadidos, según un sondeo de Reuters.
«Es como la batalla entre los datos de actividad en alza en Oriente y el malestar macroeconómico en Occidente», dijo Stephen Innes, socio gerente de SPI Asset Management, al comentar los factores que impulsan el sentimiento en el mercado del crudo.
«Desde el punto de vista de los operadores de petróleo, el dólar estadounidense debería retroceder a medida que los operadores renuncian a una nueva aceleración de las subidas de tipos de la Reserva Federal; esto, a su vez, despeja el camino para que unos fundamentos del mercado chinos más sólidos dominen el comercio de materias primas», añadió Innes.
Un dólar más débil abarata el petróleo para los tenedores de otras divisas, lo que contribuye a apuntalar los precios del crudo.
La quiebra de Silicon Valley Bank y Signature Bank, con sede en Nueva York, y la preocupación por un posible contagio provocaron una venta masiva de activos estadounidenses a finales de la semana pasada, lo que también ha presionado a la baja al dólar.
Los comentarios del domingo del CEO de Saudi Aramco, Amin Nasser, sobre la demanda de crudo de China también proporcionaron cierto apoyo.
«Si tenemos en cuenta la apertura de China, el repunte de los combustibles de aviones y una capacidad excedentaria muy limitada, estamos hablando de 2 millones de barriles, así que, como he dicho, somos prudentemente optimistas a corto y medio plazo, y el mercado se mantendrá muy equilibrado», declaró.
Estos comentarios se producen tras el anuncio de que Riad y Teherán han acordado restablecer sus relaciones diplomáticas gracias a un acuerdo auspiciado por China, lo que podría allanar el camino a la reactivación de un acuerdo nuclear que permitiría exportar el crudo iraní actualmente prohibido.
Desde el punto de vista de la oferta a medio y largo plazo, la firma de servicios energéticos Baker Hughes Co dijo el viernes que las empresas energéticas estadounidenses redujeron esta semana el número de plataformas de petróleo y gas natural en funcionamiento por cuarta semana consecutiva, por primera vez desde julio de 2020.
