Rusia ha aumentado sus exportaciones de gasoil a Brasil y otras partes de Latinoamérica tras el embargo impuesto por la Unión Europea a los productos petrolíferos rusos, según informaron los operadores y mostraron los datos de Refinitiv Eikon.
Rusia es desde hace tiempo el principal proveedor de gasoil de Europa, donde las refinerías no producen suficiente combustible para satisfacer la demanda interna de vehículos diésel.
Pero el embargo total de la UE a los productos petrolíferos rusos desde el 5 de febrero ha desviado las exportaciones rusas de gasoil a Asia, África, Oriente Medio y las transferencias de cargamentos de buque a buque (STS, por sus siglas en inglés).
El mes pasado, Rusia envió cerca de 1,0 millones de toneladas de gasoil a países africanos, parte del cual podría reexportarse, según los operadores. Algunos volúmenes podrían mezclarse y revenderse o transbordarse para reducir los costos de flete en las rutas largas.
En marzo, Rusia también envió más de 580.000 toneladas a Latinoamérica y Sudamérica, de las cuales casi 440.000 toneladas se destinaron a Brasil, y otras 140.000 toneladas a Panamá, Uruguay y Cuba, según datos de Refinitiv.
En total, los suministros de gasoil desde los puertos controlados por Rusia a Brasil ascendieron a 663.000 toneladas entre enero y marzo de este año, tras las 74.000 toneladas de todo 2022.
El mes pasado, al menos un cargamento de gasoil procedente de Rusia fue transportado de un petrolero a otro cerca del puerto de Lomé, en Togo, y se dirigió después a Sudamérica, posiblemente a Brasil, según los datos de Refinitiv Eikon