Talos Energy va a vender el 49,9% de su filial mexicana a una unidad del Grupo Carso, propiedad del multimillonario Carlos Slim, con lo que el comprador obtiene acceso al enorme yacimiento petrolífero de Zama, frente a las costas de México.
Talos seguirá siendo el accionista mayoritario de Talos México, mientras que se espera que la transacción se cierre dentro del tercer trimestre de 2023, sujeta a la aprobación de la Comisión Federal de Competencia Económica de México COFECE.
El precio de compra del 49,9% de Talos México es de 124,75 millones de dólares, lo que implica una valoración mínima de unos 250 millones de dólares por la totalidad del 17,4% de Zama.
Carlos Slim y su familia ocupan actualmente el número 10 en la lista Forbes de las personas más ricas del mundo.
La inversión del conglomerado de Slim en Talos y el yacimiento petrolífero de Zama se produce en un momento en que el Presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador está promulgando reformas y medidas empresariales consideradas poco favorables para las empresas privadas.
Talos Energy, que lidera un consorcio de petroleras extranjeras, descubrió el gran yacimiento petrolífero de Zama en 2017. Con una estimación de 670 millones de barriles de petróleo recuperables, el descubrimiento fue el mayor hallazgo de petróleo en México realizado por una empresa privada en décadas.
La petrolera estatal mexicana Pemex, sin embargo, ha dicho que el yacimiento de Zama se extiende a un bloque vecino operado por la empresa estatal. México, cuyo presidente López Obrador busca un mayor papel para Pemex en la producción nacional de petróleo, designó el año pasado a Pemex como operador del yacimiento de Zama. La denominada Resolución de Unitización del yacimiento de Zama prevé el desarrollo conjunto de todo el yacimiento en lugar de que cada parte desarrolle su propio bloque.
A principios de este año, Pemex y sus socios en el descubrimiento de Zama presentaron el plan de desarrollo del proyecto, que podría hacer que su producción de petróleo alcanzara niveles superiores al 10% de la producción actual de México.
FUENTE: Oilprice
